jueves, 8 de octubre de 2009

NUEVAS SERIES Y MAS CIENCIA FICCION

Hace rato que ya partieron las nuevas temporadas de series y como no, han debutado otras, algunas de ellas que me han sorprendido. Una de ellas es Flash Forward, que ya es denomina la nueva “Lost".

Su argumento: un día cualquiera en los Estados Juntos, la totalidad de la población pierde el conocimiento durante 2 minutos y 17 segundos. Sin embargo, una vez que todos despiertan, se dan cuenta que fue un evento a escala planetaria y en el transcurso del desvanecimiento cada uno tuvo una visión de su propia vida dentro de 6 meses, o sea, el 29 de abril de 2010.

La serie se basa en la investigación del agente del FBI de Los Angeles, Mark Benford, y junto a su equipo intentarán buscar una explicación al fenómeno a través de los “flashes” de la gente.

Es una propuesta muy interesante, que abre conjeturas hasta el infinito, tal como en un momento lo hizo Lost: la causa del desmayo global puede haber sido un experimento fallido, una conspiración salida de manos, una súper arma, alienígenas, desplazamiento temporal fallido, qué se yo. Muy buena y queda absolutamente recomendada porque tiene muchas posibilidades.

Otra serie que me gustó bastante en su arranque fue Stargate Universe, franquicia de la saga iniciada hace varios años con la serie Stargate SG1, basada a su vez en una película algo mediocre pero de culto para quienes disfrutamos de la ciencia ficción.

SU tienen una premisa aparentemente básica: un grupo de militares, civiles y científicos están en una base secreta y son obligados a cruzar prematuramente el portal Stargate porque son atacados sorpresivamente. El equipo sobreviviente llega a la nave Destiny, construida hace unos cantos miles de años por los antiguos, quienes son los creadores de los Stargates y responsables de que estén a lo largo de miles de planetas.

Aunque el tema pueda parecer básico, el enfoque dado a la serie es lo interesante, puesto que abandona el tono simplista de sus antecesores (Stargate SG1 y Stargate Atlantis) y bebe de las influencias de la fantástica Battlestar Galactica. La serie tiene un tono mucho más oscuro, con personajes muy grises (ni buenos mi malos) y sus protagonistas aparentemente están atascados en una nave que tiene una misión predeterminada que se aleja cada vez más de la tierra.

A mi juicio tiene todos lo ingredientes para ser una buena serie de Sci Fi, puesto que propone un enfoque de exploración de lo desconocido (como Star Trek), tiene una atmósfera opresiva oscura y los tripulantes de la nave están obligados a seguir un camino quizás sin retorno enfrentados a la posibilidad de conocer nuevas razas tanto hostiles como aliadas. Reitero que me entusiasma porque tiene un enfoque más maduro que sus antecesoras. Aunque me duela reconocerlo, eran ciencia ficción bien palomitera pero entretenida. Esperemos que las historias sean de calidad.

Por cierto, los otros filetes de primer corte que ya partieron son Fringe, Dexter, House M.D. y The Big Bang Theory.

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