
Si bien la periodicidad y la distribución en Temuco de Panini está resultado un desastre, ello no ocurre afortunadamente con la calidad de las historias ultimate que llegan a mis manos.
Recién acabaron las líneas argumentales de Ultimate Spider – Man y Fantastic Four. Como ya decía en un artículo anterior, la principal característica de haberme encantado con este nuevo universo es que es independiente de la continuidad Marvel tradicional. Para los no marvelianos ni mucho menos expertos en el tema, esto es atractivo.
El número seis de Ultimate Spider Man bajó las revoluciones desde el remate del primer encuentro del arácnido con Kingpin y Electro. Y bueno, es así nomás, estamos ante un buen cómic, bien relatado y bien dibujado. Este último número me gustó especialmente puesto que me encontré con un relato que no presentaba peleas, ni hay catástrofes o supervillanos. Peter Parker decidió contarle su secreto a Mary Jane… y en los primeros números de la colección, algo inimaginable en las historias más clásicas de superhéroes.
El joven picado por una araña genéticamente modificada, en su pieza, le cuenta a su “mejor amiga” que es Spider Man. Ella, esperando una declaración amorosa o simplemente un atraque, se encuentra con tamaña sorpresa. Magnífico. Peter le muestra que no bromea y Mary Jane reacciona de una manera sincera, coqueta y hasta pendeja sin guardarse lo que piensa. Le pide que hasta la lleve a columpiarse, mientras Tía May se pasa los medios rollos y como remate acaba “echando” a “Em Yei”.

Mark Bagley realizó un buen trabajo sobre los guiones. Si bien algunas de sus “rostros” no me convencen en algunas ocasiones, aquí hay encanto en el trazo, más en las actitudes de Mary Jane. Habrá que ver cómo sigue la historia.
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