martes, 8 de noviembre de 2011

PITUFANDO...

Al comentar la película de Los Pitufos sé que se me cae el carnet, porque soy de la generación que los vio en la TV y tuvo las revistas que si no me equivoco, publicó Editorial Pincel. Claramente nunca le he tenido fe a los film en imagen real que adaptan dibujos animados como Scooby Doo o el Oso Yogui, que han resultado ser ahí nomás.

A mi juicio los Pitufos sí funcionaron, ya que los pequeños suspiritos azules tienen carisma y el gran Gargamel, interpretado con maestría por el actor Hank Azaria (notable su caracterización), tienen momentos geniales. La película es bastante entretenida y muy fiel al producto original.

La trama es simple y plagada de gags, guiños a Peyo (el creador); y las torpezas de Tontín, Gargamel y Azrael que serán el catalizador de esta “épica” jornada. Tenemos la Aldea Pitufa, muy lograda, a vistas panorámicas de la gran mayoría de los Pitufos (Bromista, Carpintero, Goloso, hasta el huequereque de Vanidoso, etc.), sale la casa de Gargamel tal cual como era vista en la srie de TV y en el apartado “fashion”, villano y héroes sales con sus trajes originales. En todo caso, me hubiera gustado escuchar las voces originales, péro bueno...

En resumidas cuentas, y como ya dije, la propuesta de los Pitufos en la gran pantalla funcionó porque no se rompieron la cabeza para la historia: un grupo de Pitufos, debido a Tontín, terminan en New York, seguidos de Gargamel y su gato. El cliché era obvio, se hacen amigos de una joven pareja que será padre y juntos compartirán toda una serie de desventuras para lograr que los pequeños duendes vuelvan a su época.

Entretenida. Estoy seguro de que habrá secuela y eso sí, esperemos que esta vez NO sea en New York ni el presente.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo también disfruté de la adaptación cinematográfica de Los Pitufos. Quizá carezcan de la profundidad que queramos atribuir a la obra original pero me parece un acertado producto de entretenimiento destinado a todos los públicos que aborda la esencia más sencilla de los personajes para ofrecernos un relato amable y hecho desde el cariño, la forma correcta de llegar a toda una nueva generación que, con suerte, se interesarán por estos personajes y los mantendrán con vida unos cuantos años en la memoria colectiva

El Bicho Azul dijo...

Amén !!!