martes, 27 de diciembre de 2005

¿Y DONDE ESTA EL DETECTIVE?


Lamentables han resultado dos sagas que ha publicado quincenalmente Sticker Design…

Cierra la segunda tanda argumental de la revista quincenal de Batman y debo decir que estoy plenamente desilusionado. “Hush” y “Tabula Rasa” han resultado ser de las cosas más decepcionantes que me ha tocado leer del hombre murciélago. Es más, me hace añorar con mucha rabia las etapas clásicas post crisis que nos ofrecieron historias magníficas.

Siempre me gustaron las sagas que hacían Grant - Breygfole, un equipo creativo que ofrecía buenas tramas de detectives, de esas en que Batman debía usar su mente más que los combos para solucionar los casos. De aquellas historias surgieron Scarface, Cornelius Stirk, Anarchy y muchos otros que aún integran con honores lugar en la galería de villanos de Batman.

Pero esos fueron otros tiempos. Lo que ha sacado Sticker Design en su publicación quincenal ha dejado bastante que desear en muchos aspectos. De “Broken City” y “Mientras Vuela el Cuervo” poco puedo decir, porque no las he leído.

“Hush” me pareció que arrancó con gran potencia, siendo factor de ello innegablemente el dibujo de Jim Lee, un artista que me gusta y que, pese al quien le pese, revolucionó hace unos años el panorama norteamericano. Asimismo, “Silencio” era conocida como la saga más famosa de Batman de los últimos tiempos, por lo cual obviamente mis expectativas eran mayúsculas. Pero al cabo de plantear una trama interesante, que daba para explotar al máximo la faceta detectivesca de Batman, nos encontramos con una sucesión de episodios de relleno que lo único que hacen es mostrar a la Batifamilia en pleno, con apariciones bastante mediocres de personajes emblemáticos como el Joker o Harvey “Two Face” Dent o la “cabeza del demonio”.


Loeb simplemente escribió una historia para que Jim Lee se luciera – que lo hace -. Sin duda, la DC Cómics vio ahí un superventas en las librerías especializadas, cosa que fue ratificada por los fans. Pero ya sabemos que ventas no es sinónimo de calidad.

Lamentable. Hacia el final, cuando nos “sorprenden” con una gran revelación, esta resulta ser un engaño más de este nuevo enemigo, “Hush”, quien más encima fue uno de los artífices del juego de otro “supervillano”: The Riddler, o el Acertijo. No sé. Es increíble cómo una historia que tiene un remate tan mediocre pudo haber gastado un año de papel y tinta en EE.UU. Da la triste impresión de que “Hush” podría haberse hecho en cuatro episodios y punto. Desde la aparición de Superman, la historia simplemente empieza a guatear.

Y “Tabula Rasa”… también lamentable, con villana mediocre de por medio y una historia de tensión que no termina en NADA. Esa portada de Bolland (lo único bueno de los cuatro episodios) con Batman y Bane, presentados como el nuevo dúo dinámico, resultó ser un cartel inútil acerca de las potencialidades del supuesto parentesco vía padre. La respuesta a esa interrogante es descaradamente y mediocremente resuelta con cero tratamiento, sin tensión argumental, sin nada.

Sticker Design está escogiendo muy mal las historias a mi juicio. Echo de menos al Batman detective, que creo que aparece en los tomos que han publicado (y que reitero que no leído, cosa que solucionaré a la brevedad). Da la impresión de que la editorial argentina quiere potenciar los tomos más que las revistas, y para ellos nos está estafando con historias que son presentadas como obras fundamentales… y que no lo son. Quiero a Batman de vuelta.

2 comentarios:

El Bicho Azul dijo...

En todo lo que dices tienes razón, pero puedes contar eventos importantes en un sólo número y sin perder la esencia del personaje.

Hush se pierde entre tanta cháchara.

INFIERNOSILENTE dijo...

los dos tienen razon, solo que esta historia tiene como la idea de incluir hilos argumentales nuevos en la trama de bats

la nueva historia "tabula raza" esa si que es chanta..hoy me compre los tres numeros juntos los lei y quede PLOP

bueno ojala y esto mejore

en realidad se extraña al detective