miércoles, 17 de agosto de 2011

CAPTAIN AMERICA: ESCUDOS, BARRAS Y ESTRELLAS PARA LOS REGALONES

A pesar de considerarme un fan DC más que de la Marvel, nunca he desconocido que esa compañía cuenta con excelentes personajes y sagas de mucha calidad. El Captain America es uno de ellos, desde cabro chico siempre me llamó la atención y hoy adulto disfruté bastante lo que Ed Brubaker ha hecho con él.

Fui con muchas expectativas a ver esta película, que como bien dice su título, se trata de la epopeya del primer Vengador, el supergrupo de la Marvel que tendrá su versión fílmica tras haberse consolidado todo un universo tras los films previamente realizado y todos interconectados. Me refiero, obviamente, a Iron Man, Hulk y Thor, cada uno con sus propias gracias y falencias. En este sentido, debo decir que Captain America queda al debe en muchos sentidos.



La trama es conocido por todos: se trata de los albores del Universo Marvel, cuando Steve Rogers (Chris Evans) es el único voluntario sobreviviente de un programa experimental que lo convierte en el súper soldado llamado Capitán América. Tras el asesinato del gestor del experimento, el doctor Emil Erskine, Rogers se convierte en un personaje único e irrepetible y se transforma en el líder de la batalla contra la organización HYDRA, dirigido por el villanísimo Red Skull (Hugo Weaving, espléndido como siempre), una especie de renegado deforme de los nazis.

Si bien la cinta parte muy bien mostrando el conflicto de un muchacho debilucho que desea con fervor servir a su país en el frente enemigo en el marco de la Segunda Guerra Mundial; y el factor súper interesante del plan de los EE.UU. de contar con un ejército de súper soldados gracias a un experimento, tras esto el producto se desinfla.

A pesar de su buena dosis de acción, la cinta se desperfila mucho a momentos, sobre todo cuando Steve Rogers se transforma en un elemento de farándula, incluso cayendo en la autoparodia, cuando en realidad el héroe debió ser puesto de inmediato en el frente a luchar contra la amenaza nazi, que es otro elemento fuerte de los mitos del Capitán y que en esta ocasión fueron dejados en un segundo plano. De hecho Cráneo Rojo es más una agente con agenda propia y que se ha desvinculado del Tercer Reich. Personalmente, hubiera preferido más protagonismo del nazismo como elemento antagonista del film, pero bueno.

Por todos estos elementos, reitero que la película queda al debe, no cuaja del todo y termina siendo sólo un preámbulo o introducción larga al producto fuerte de todas las entregas fílmicas de la Marvel: The Avengers.

Eso sí, en el apartado actoral hay que destacar el trabajo de Chris Evans, quien encarnó perfectamente al Steve Rogers súper soldado y el alfeñique previo al reclutamiento. Está claro que los efectos especiales ayudan harto, pero la cara de Evans trasmite ansias de pelear en la guerra y sufrir por ser un enclenque al que nadie toma en serio, salvo su amigo Bucky.

Ahora sólo resta esperar a The Avengers que sin querer queriendo estará ambientada en un universo más parecido al de los “Ultimates” que de la continuidad clásica, lo cual encuentro que está más que bien.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola :

Me llamo Jimena San Martín soy administradora de un sitio web. Tengo que decir que me ha gustado su página y le felicito por hacer un buen trabajo. Por ello me encantaria contar con tu sitio en mi directorio, consiguiendo que mis visitantes entren tambien en su web.

Si estas de acuerdo hazmelo saber enviando un mail a jimena.sanmartin@hotmail.com
Jimena San Martín

Anónimo dijo...

ahi nomas esta pelicula
como Thor y peor qu iron man

Bruno Diaz

Anónimo dijo...

segun se, lo de no meter a los nazis es mas que nada para no abrir viejas heridas y ademas de por las obvias movidas de maerketing (obviamente los alemanes tambien leen marvel)


Koko